Los ´80 , con pases y tropiezos

EL EXITOSO NACIONAL '81

Di Stéfano entró como director insistiendo en que quería un "River con pressing". El plantel hizo una gira por México y Estados Unidos.Para reforzar el plantel se contrató a Bulleri, Gallego, Jorge García, Alberto Platero y Olarticochea. Otra vez parte del platel -siete en total -fueron convocados para integrar el seleccionado nacional que actuaría en el Mundial de España '82, entre ellos Fillol, Tarantini, Passarella, Díaz y Kempes. River pasó las cuatro primeras fechas ajustándose a la modalidad de juego que le pedía el nuevo DT, Di Stéfano. Pasada esa prueba, su campaña se vió coronada por el éxito: todos los partidos terminaban en victorias, excepto dos encuentros con Ferro Carril Oeste, que superó ambas veces a River. Los cotejos en total sumaron siete triunfos, 5 empates, 26 goles a favor, 12 en contra y un total de 18 puntos. Los clásicos fueron una victoria de River y un empate en el segundo encuentro. En el último tramo, River superó a Rosario Central por 2 a 1. Un empate posterior con Central 0 a 0 llevó a River a la semifinal. En las semifinales, el primer partido fue un empate de 1 a 1 frente a Independiente, con gol de Passarella y un expulsión a Gallego por protestar por el gol de Independiente. En el desquite, Independiente atacó ferozmente pero River se defendió como un león. Por eso llegaron a un 0 a 0.

En los partidos finales, un River renovadoramente seguro venció a Ferro 1 a 0 con remate de Olarticoechea. Cuando llegó la revancha final, River era consciente de que contaba con una línea defensora sólida formada por Fillol, Saporiti, Tarantini , Passarella y Olarticoechea, que, con la ayuda de Bulleri, Gallego y Comisso , respaldaban el ataque efectivo de Kempes, Tévez o Díaz y Vieta.Alonso no pudo jugar por estar lesionado. Ahí fue cuando casi sobre el minuto 60 del partido, Kempes remató un "casi gol" sobre un poste, pelota que sobre el rebote fue recibida por Vieta, quien se la dejó a Kempes, que insistió cabeceándola antes de que el arquero Barisio pudiera atinar a reaccionar. Era el 20 de Diciembre de 1981. River acababa de consagrarse Campeón Nacional. Claro que el hecho de contar con Di Stéfano en la dirección no garantizaba ganar la Copa Libertadores, en la que River actuó sin brillo. Como lo explicó el mismo Di Stéfano: "No se pueden hacer milagros"

Lo que sí ganó River a posteriori fue la Copa de Oro '82, en Mar del Plata. El torneo empezó con Independiente venciendo a Racing, y luego un River -Racing 0 a 0.Boca luego le ganó a Racing 4 a 1 y a Independiente 1 a 0.River le ganó a Independiente 2 a 0. La emocionante final fue disputada entre Boca y River. El puntapié inicial lo hizo la actriz Lindsay Wagner, famosa por la serie televisiva "La Mujer Biónica", invitada especialmente al clásico. River ganó el encuentro 1 a 0, con gol de Ramón Díaz. Fillol terminó el torneo con el arco invicto.

MÁS PASES

Después del triunfo del Nacional, un éxodo de jugadores que se marchaban con distintos pases volvió a rearmar un plantel distinto. Norberto Alonso se fue a V ‚ lez, Ramón Díaz al Sportivo Calcio de Nápoles (Nápoli), Heredia a Argentinos Juniors, Ortiz y René Houseman a Huracán , Kempes a Valencia, Savaresse al Club Sportivo Patria de Formosa, Pavoni a Guadalajara de México y Passarella al Fiorentina, de Italia.

Tuvieron pases libres J.J .López, Cejas, Comelles, Iervas, Lonardi, Omar Labruna y Héctor López.

Al mismo tiempo, firmaron su contrato Russo, Vieta, Pedro Vega, Jorge Gordillo y Sergio Goycoechea.

AMERICO GALLEGO

Américo Rubén Gallego fue una de las adquisiciones que hizo River a mediados de 1981.Nacido en Córdoba en 1955, Gallego se destacaba por tener una enorme resistencia física y un juego generoso, ideal para fortalecer el equipo. A él no le interesaba su lucimiento personal sino lograr que las jugadas con sus compañeros finalmente se armaran. De físico robusto, afirmaba con perseverancia el bloque defensivo y cubría todos los huecos, estando siempre donde m s falta hacía. Jugó bastante tiempo en Newell's de Rosario hasta pasar a River justo para darle al plantel el empujón necesario para ganar el Nacional del '81, donde llegó a meter su unico y valioso gol. En el '83 hizo tres goles, en el '84 hizo otros 4, en la temporada '85/'86 hizo otro y en la temporada '87/'88 logró otro tanto más. Con Passarella, Tarantini y Kempes fue uno de los siete riverplatenses convocados por Menotti para formar la selección del Mundial '82. Lució la camiseta a número 5 a lo largo de 10 campeonatos en River. De pocas palabras y asistencia perfecta, Gallego fue uno de esos hombres cuyo juego sólido y seguro inspira confianza en sus compañeros. Gallego fue algo así como la columna vertebral del equipo, sosteniendo el partido para que los habilidosos, los sorpresivos, pudieran hacer suya la pelota y meterla en el arco. Total, Gallego siempre estaba ahí para cubrirlos.

1982...EJEM, ¿HAY QUE MENCIONARLO?

El éxodo de cracks hacia otros clubes dejó a River desmembrado, con un aire de despiste que se notó durante toda esta campaña. La pretemporada empezó definitivamente mal: River no quiso presentarse a un partido frente a Peñarol por - cuándo no- un conflicto con los pagos a los jugadores. Se suspendió por ello a Fillol, Passarella, Vieta, Commiso, Kempes, De Los Santos, Merlo, Olarticoechea, Gallego y Díaz. Todos recibieron una sanción por 45 días, que el Consejo Directivo de la AFA redujo a 35 días, sumándole a esta suspensión una fuerte multa para el plantel. Justo cuando ya se estaba hablando de prescindir de Di Stéfano,- que como técnico no rendía los resultados esperados-, hubo un nuevo grupo de grandes que se iban: Ramón Díaz, Passarella y también Kempes, que volvía al Valencia. Di Stéfano se la vió venir, y arregló con Real Madrid para seguir ahí su trabajo al terminar el campeonato.

En suma, el nuevo River era una especie de mezcolanza de chicos de divisiones inferiores con suplentes a los que se entren ¢ de emergencia. Era obvio que semejante plantel improvisado no cosachar ¡ a grandes logros. Alcanza con hablar de los pocos goles conseguidos: Jorge T ‚ vez fue "goleador" con 5 magros tantos, seguido por Jorge Garc ¡ a con 3 tantos . Roberto Gordon, Vega, Commisso y Alegre lograron s ¢ lo dos goles cada uno.

Hubo un partido bien jugado en el que Merlo creyó que podrían clasificar, cuando River se impuso a Gimnasia por 2 a 0.Luego hubo un empate ante Newell's y otro 0 a 0 ante Boca. Después de otras dos fechas, una derrota ante Instituto confirmó las más sombrías sospechas de que River iba cuesta abajo. El plantel era inexperto y no lograban armar un ataque coherente. Los partidos fueron desprolijos, llenos de tensión, pero sin una sola jugada trascendente.

Algo había que hacer, y en forma urgente: River no podía seguir así.

MÁS CAMBIOS EN EL PLANTEL

Sabiendo que Di Stéfano se iba, los dirigentes de River empezaron a convocar a los posibles nuevos directores técnicos entre varios profesores de prestigio. Se quedaron con "El Polaco" Vladislao Cap, que ingresó al equipo el 13 de Mayo.

Como hubiera hecho cualquiera en su sano juicio, Cap pidió refuerzos urgentes. Así fue como se contrató a Antonio Alzamendi de Independiente, Enrique Nieto y Raúl Chaparro de Instituto de Córdoba, Gabriel Puentedura de Tucumán, Sergio Goycoechea de Defensores Unión de Zárate, a los que se unió Carlos Randazzo, con pase libre. Pero sólo cuatro meses después, el 10 de Diciembre de ese año, falleció Cap dejando a River más desamparado que nunca.

El plantel se esforzó, pero tuvo como directores técnicos interinos primero a José Manuel Oscar Vázquez y luego a José Ramos Delgado y José Dominici .

Alzamendi demostró que Cap había tenido mucha razón en convocarlo: logró 7 tantos. Vieta fue el goleador, con 8 tantos, y Chaparro logró 7 tantos, como Alzamendi.

River se enfrentó con Vélez una lamentable tarde en el Monumental, y Alonso le metió uno de los 3 goles velezanos a un River que sólo logró 2. Alonso no dejó de quejarse de su puntería: "Fue el gol más triste que hice en mi vida", dijo, sintiendo lástima por su viejo club.

River fue derrotado por Racing de Córdoba y Rosario Central en el Monumental, así que ni siquiera les servía aquello de jugar de local. Ante Platense, Estudiantes y Boca fueron todos empates 1 a 1. Hasta Fillol se lamentó entonces, reconociendo haber sido "culpa suya" un gol que le hizo Gareca.

Después de una derrota ante Independiente, River le ganó un partido a Ferro y uno a Sarmiento. Empató con Instituto 1 a 1, y logró un margen victorioso de un 3 a 1 ante Nueva Chicago, otro ante Racing 3 a 0 y otro de 2 a 1 ante Argentinos. Pero no era momento de hacer alarde, porque el resto de los partidos fueron mediocres.

River había puesto otra vez todos los huevos en la misma canasta : la Copa Libertadores. Y otra vez la perdió. Para colmo, fue derrotado por Flamengo 3 a 0 en el Monumental, equipo que lo volvió a derrotar en Brasil con un 4 a 2. Peñarol, a su vez, primero lo venció 4 a 2 y después 2 a 1.

Realmente, para River, este fue un año para olvidar.

1983: OTRO AÑO ESPANTOSO

1983 tampoco fueun año pródigo en alegrías para River, que siguió con un juego irregular, con poca suerte, y un equipo a la deriva. Terminó ganador de la "carrera de lentitud" con un record de derrota en su historia: sólo llegó al puesto 18vo.en el marcador del Metropolitano. Lo extraño es que debutó frente a Talleres con una actuación impecable que le retribuyó un 3 a 0 impactante. Esa buena racha le duró dos partidos más .Pero más conflictos institucionales entre jugadores y dirigentes dejaron afuera a los titulares y el plantel siguió con suplentes que fueron castigados por Unión, San Lorenzo y Racing de Córdoba, pese a que su actuación fue digna. La reincorporación de los titulares mejoró los resultados cuando ya era demasiado tarde para remontarse en el marcador. Ganaban , perdían, volvían a ganar , y terminaban perdiendo la mayoría de los encuentros en un subibaja de resultados que demostraba la inseguridad de un equipo que aún mostraba muchos huecos .Para colmo, los grandes ya tenían pensado emigrar a otro clubes : Fillol a Argentinos Juniors, Tarantini al Bastiais de Francia y Vieta a Estudiantes.

En medio de tanta noticia desalentadora, River se sumio en la tristeza con la muerte de Angel Labruna, a los 65 años. Después de una operación de vesícula de la que acaba de ser dado de alta, Labruna murió en los brazos del "Beto" Alonso, luego de pedirle que lo ayudara a levantarse de la cama. Con él se fue todo un pedazo de la historia de River. Quizás el mejor. Una nueva desgracia se sumó a un año por demás difícil. El 12 de Octubre, al terminar el partido que River perdió ante Rosario Central 2 a 1, los jugadores discutieron fuertemente en los vestuarios, culpándose mutuamente por la derrota. De golpe, el jugador Oscar Víctor Trossero, se cayó en la ducha víctima de una fuerte taquicardia que culminó en un infarto que le causó la muerte mientras estaba internado en el Sanatorio Freyre.

Trossero había nacido en Santa Fe en 1953 y pasó de Boca a Racing, de Racing a Unión, y de ahí a Deportivo Cali y Nantes de Francia, equipo que compartió con su tocayo Enzo Trossero, antes de entrar a River en el '83. Trossero estaba listo para participar en un equipo campeón, pero entró en uno de los peores años de River. No sería desacertado decir que tanta derrota le partió el corazón.

River terminó el torneo siendo penúltimo, y fue el equipo con menos goles a favor: 37. Los resultados de la campaña fueron desoladores: de 36 partidos jugados, ganaron 10, empataron 9 y perdieron 17, sumando 50 goles en contra y 29 puntos.

Después de haber sido Ramos Delgado el DT, el puesto había sido ocupado por José Varacka, que renunció con el preparador físico en Octubre, y fue reemplazado por Carlos Dominici y Carlos Hernández.

Todos estos cambios de dirección no hacían más que confundir día a día a los jugadores sobre qué estilo se suponía que debían seguir .Tan es así, que River empezó perdiendo hasta la Copa de Oro en Mar del Plata, al ganar dos partidos y perder otros dos.

Antes de renunciar, Varacka había pedido exclusivamente delanteros para mejorar el plantel. Aragón Cabrera intentó hacerle caso, sabiendo por experiencia que el ojo clínico de un DT raramente se equivoca en qué es lo que le falta a un equipo. Así fue como entraron a River Alberto Bica, de Nacional de Montevideo,Sergio Scilovetto del club Deportivo Maipú de Mendoza, Oscar Trossero libre del Montepellier de Francia, Roque Erba de Nueva Chicago y Héctor Enrique de Lanús. Ahí fue cuando se supo que el presidente de River estaba extremadamente interesado en incorporar al plantel a un uruguayo del Wanderers de Montevideo que estaba demostrando condiciones notables en su ciudad.

Se trataba de Enzo Francescoli.